Nuestra casa

Bienvenidos a Arraigo

Arraigo es una empresa familiar dedicada a la producción y comercialización, local y ética, de fruta de temporada.

Un proyecto que surgió gracias a la pandemia, como una vía de escape para volver de la ciudad al campo. Un buen giro de guión, buscando una vida más sencilla, fuera de la vorágine consumista, más pausada y con una mayor conexión con la naturaleza. Algo que supone ir a contracorriente de lo socialmente aceptado.

Partiendo de la convicción de que los seres humanos cada vez estamos más desconectados de nosotros mismos, encerrados en ciudades, trabajando con ordenadores, creándonos necesidades que, en el fondo, son artificiales. 

El objetivo es reclamar una mayor conexión con la tierra, con lo natural, lo verdaderamente importante.

Somos parte de la naturaleza, animales salvajes

Es + local

Trabajamos para reducir el impacto ambiental de los productos, ofreciendo alternativas producidas en el sur de España, en la Costa Tropical de Granada.

Ofreciendo exclusivamente fruta de temporada.

La naturaleza es muy sabia. ¿Por qué no hacerle caso?

Es + justo

De mi casa a tu casa.

En Arraigo apostamos por el contacto directo contigo, eliminando a los intermediarios para obtener un precio más justo por nuestros productos.

Sabor + real

Nuestros productos tienen el sabor real que debería tener la fruta de temporada. Más real que la vida misma.

Solo recogemos la fruta en su momento exacto de maduración, intentando reducir los químicos y evitando fungicidas y herbicidas en el cultivo, lo que potencia su sabor natural.

¿Cómo se hacen los envíos?

Todo el proceso de recogida y posterior elaboración de las cajas es artesanal, colaborando toda la familia. Lo que implica bastante tiempo y dedicación.

Los envíos se realizan los martes, recogiendo la fruta el día anterior. El tránsito es de 24 a 48 horas, por lo que recibirás tu pedido el miércoles o jueves de esa semana.

Los pedidos se tienen que realizar unos días antes de que termine la semana, como máximo lunes por la mañana. No nos gustan las prisas, ya que ponemos mucho amor en cada cajita.